PRI y PAN padecen rebelión para renovar dirigencias, mientras Morena se disciplina
Pese a la derrota electoral, Alejandro Moreno busca reelegirse en el PRI y Marko Cortés pretende que su grupo tenga el control del PAN.
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Pese a la derrota electoral, Alejandro Moreno busca reelegirse en el PRI y Marko Cortés pretende que su grupo tenga el control del PAN.
El PAN y el PRI están sumergidos en conflictos internos de cara a la renovación de sus respectivas dirigencias luego de presentar los peores resultados electorales en su historia. En contraste, Morena camina hacia una decisión aterciopelada tras llevarse “el carro completo” en la reciente elección federal.
Del lado del tricolor, la rebelión se organizó en contra de Alejandro Moreno, presidente del PRI, que pretende reelegirse y que modificó los estatus de su partido en una Asamblea a modo; mientras que en Acción Nacional, los panistas intercambian reproches y señalamientos porque supuestamente Marko Cortés, el líder blanquiazul, quiere dejar a uno de sus allegados al frente.
En La-Lista platicamos con liderazgos de la oposición que se han mostrado críticos hacia sus propias dirigencias y que han demandado transparencia en los procesos, alto a los acuerdos cupulares y pluralidad y reflexión luego del desastroso papel que ambas fuerzas políticas protagonizaron.
Ernesto Ruffo, exgobernador de Baja California, y Gerardo Priego, excandidato a la dirigencia en dos ocasiones, coincidieron en que Cortés debe abrir la próxima elección a la ciudadanía y acabar con el “control de pandillas”; en tanto que Dulce María Sauri confía en frenar el atropello que encabeza el presidente nacional para “perpetuarse en el poder” casi una década adicional.
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PAN: reproches y cuestionamientos
El PAN debe renovar su dirigencia nacional en octubre. Marko Cortés permaneció en el cargo dos periodos: de 2018 a 2021 y de 2021 a 2024.
Cuando Cortés Mendoza rindió protesta como dirigente nacional, el PAN gobernaba en 11 entidades. En la elección del pasado 2 de junio no sólo perdió la elección presidencial, sino que su partido retrocedió en el Congreso al pasar de ser segunda fuerza política a tercera, de acuerdo con las estimaciones del INE dadas a conocer hasta ahora.
También perdió Yucatán, estado que era uno de sus bastiones, por lo que este 2024, sólo conservó Guanajuato, y actualmente gobierna en Querétaro, Aguascalientes y Chihuahua.
Hace un mes, 13 exgobernadores le hicieron un llamado a Marko Cortés a través de una carta abierta, en ella le pedían abrir el proceso de renovación de la dirigencia a la ciudadanía,y evitar acuerdos con “padroneros”.
Ernesto Ruffo, primer gobernador emanado del PAN, ex aspirante a la dirigencia nacional de ese partido, y quien es uno de los firmantes de dicho documento, considera que el blanquiazul debe llevar a cabo una elección primaria, “de la manera en que fue electa Xóchitl Gálvez el año pasado como candidata de la coalición PRI, PAN y PRD”.
En entrevista con La-Lista, el también exsenador Ernesto Ruffo asegura que Marko Cortés ejerce un “control absoluto en el cargo”que se ha ido agravando con el paso de los años.
Ruffo Appel recordó que desde 2019 rechazó a Cortés Mendoza como dirigente nacional, al considerar que llegó al puesto de manera ilegítima, a través de acuerdos internos y manoseo del proceso, lejos de una elección legítima de voto libre y secreto.
“Esa manera de hacer las cosas es la que debe de desaparecer totalmente, y abrir estos procesos internos del PAN para que la transparencia haga que podamos ir recobrando la confianza que nos tuvo el público hace algunos años. Urge poner punto final al control de pandillas“, atajó.
El panista explica que este mecanismo evitaría que desde la cúpula de Acción Nacional haya control pe interferencia en la democracia interna del partido.
“Los padroneros son sujetos que operan listas de militantes para que estos vayan y voten por quien ellos decidan en el Comité Ejecutivo Nacional. Y en algunos casos se nos ha informado desde distintas elecciones internas que se les paga”, explica Ruffo Appel.
El panista señala que rumbo a la renovación de la dirigencia nacional, “se rumora que hay una inercia política en favor de Jorge Romero” y reprueba este escenario al subrayar que la tarea fundamental de los partidos políticos es atender el interés público.
“Han solapado el control de pandillas, de mercenarios de la política, pero nunca el interés público. Las pandillas mercenarias de los dirigentes es algo que obviamente no funciona. Lo que protegen es el interés de esas estructuras controladas y se asignan sueldos, tienen influencia, se dan ellos mismos otras candidaturas“, zanjó.
El exmandatario advierte que lo vivido por el PRD, podría replicarse en el blanquiazul de no atender la demanda ciudadana y exige a Cortés que reaccione frente a la posible catástofre.
La carta de demandas fue signada por los exgobernadores de Guanajuato: Juan Carlos Romero Hicks, Carlos Medina Plascencia y Hector López Santillana; de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña, que será senador en la próxima legislatura, y por el yucateco Patricio Patrón Laviada, quien fue el primer panista en gobernar esa entidad.
También, se sumaron exmandatarios de Nuevo León, Fernando Canales Clariond; de Chihuahua, Francisco Barrio; y de Jalisco, Alberto Cárdenas Jiménez. Los tres exsecretarios de Estado durante el gobierno del expresidente Vicente Fox.
En tanto que Gerardo Priego Tapia recordó a La-Lista que hace tres años, cuando se hablaba de la posibilidad de la reelección de Marko Cortés el alertó que esta medida derivaría en “suicidio colectivo”.
El exdiputado federal y quien buscó presidir en dos ocasiones a ese partido, reconoce la acción de los exmandatarios, pero advierte que el PAN requiere de una “rebelión constructiva, positiva y renovadora”, al considerar que hay “mucha tibieza” en el actuar de las 13 figuras panistas.
“Este grupo bien intencionado de exgobernadores está siendo muy tibio. El PAN necesita una rebelión (…) (se necesita) tomar las riendas, ejercer presión, quejarse, cuestionar, proponer, señalar, evitar que un sinvergüenza siga decidiendo, como el presidente (Marko Cortés) ahorita, y que impongan a otro sinvergüenza como su predecesor”, advirtió.
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“Yo lo dije hace 3 años: si Marko Cortés se impone como presidente del PAN, va a ser el suicidio colectivo, y lo que ocurrió este 2024 fue el tiro de gracia, pero si efectivamente se impone a Jorge (Romero), tristemente esa va a ser la sepultura del PAN“, sentenció.
El tabasqueño lamentó que tras los resultados electorales, pocas voces hayan exigido la renuncia de Cortés Mendoza y hasta puso como ejemplo la rebelión que actualmente vive el PRI como algo que debería ejecutarse en su partido.
“Por lo menos allá están sacando la cara, y los que son considerados personajes están dando la batalla para cuestionar el abuso del presidente Alejandro Moreno. Acá muy poquitos se rebelaron para quitar a Marko, presionarlo, cuando hizo tan mal papel para el país y siguió con sus corruptelas, y hasta se autonombró senador plurinominal, en un descaro tremendo”, consideró.
Sin embargo, confió en que pronto algo sacuda al PAN, de modo que sus principios se hagan valer entre todos su militantes y se renueve la presidencia con una figura que enarbole la causa “cero cacicazgos”.
“Yo creo que todavía hay distribuidos por ahí militantes reales. Panistas con convicción, a esos son los que les estoy hablando, esos son los que tienen que levantar la voz, hablar en redes sociales, en las asambleas del PAN, en los medios de comunicación. Tenemos que denunciar a estos sinvergüenzas piratas de la política mexicana”, agregó.
Dentro de los aspirantes a la dirigencia nacional del PAN se encuentran la exdiputada federal Adriana Dávila; el actual coordinador de los diputados federales del blanquiazul, Jorge Romero; también el senador Damián Zepeda y el excandidato de la coalición del PRI, PAN y PRD al gobierno de Puebla, Eduardo Rivera.
Los estatutos del PAN establecen que la dirigencia podrá mantenerse en el cargo por tres años, con la posibilidad de reelegirse un periodo más.
La rebelión en el PRI
En el PRI está en marcha una rebelión encabezada por exdirigentes nacionales de ese partido, luego de que Alejando Moreno, su líder actual, realizara maniobras en busca de perpetuarse en la dirigencia nacional.
La mesa está puesta para que Moreno Cárdenas con Carolina Viggiano, secretaria general, se inscriban el 22 de julio en el proceso interno para buscar su reelección para el periodo 2024-2028, luego de que la 24 asamblea nacional de ese partido aprobara la modificación de los estatutos.
En dicho acto político, con mayoría de delegados afines a Moreno Cárdenas, se aprobó la modificación al artículo 178 de los estatutos del partido, para establecer que las personas titulares de la presidencia y secretaría general del partido puedan ser reelectas hasta por 3 periodos consecutivos de 4 años. Es decir, “Alito” podría eternizarse en el cargo hasta 2032.
A partir de dichas modificaciones, el consejo político del partido, integrado también por cercanos a Moreno, aprobó que el proceso de renovación de su dirigencia quede en manos de ellos mismos, por lo que, de acuerdo con la convocatoria emitida, el 11 de agosto se llevaría a cabo la elección interna, cómputo y publicación de resultados.
La Ley General de Partidos Políticos establece en su artículo 34 la imposibilidad de realizar cualquier reforma a documentos básicos, como son los estatutos de un partido, en medio de un proceso electoral; precisamente el actual periodo aún no concluye, pues hace falta la calificación de la elección que se llevará a cabo a más tardar el 6 de septiembre.
No obstante, la autoridad electoral debe valorar los hechos y emitir una determinación.
Figuras consideradas “pesos pesados” del PRI, como son los expresidentes Dulce María Sauri, Pedro Joaquín Coldwell, Enrique Ochoa Reza y Manlio Fabio Beltrones, comenzaron en días pasados la estrategia legal para evitar la perpetuidad de Alejandro Moreno en el cargo.
Hasta ahora, han presentado al menos dos recursos de impugnación ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. En el primero de ellos, señalan de ilegal la 24 asamblea nacional del PRI llevada a cabo el pasado 7 de julio, y los resolutivos de esta.
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La expresidenta nacional del PRI, Dulce María Sauri, explica a La-Lista que se trata de “la impugnación madre”, es decir, la principal, pues si el Tribunal Electoral considera que la asamblea no reunió los requisitos básicos, podría echar abajo la serie de acciones que han derivado de la misma.
Los exlíderes nacionales del tricolor también presentaron una impugnación para que se suspenda la convocatoria de la comisión de procesos internos del partido en la que se inscribiría Alejandro Moreno para ser reelecto.
Sauri Riancho explica que la convocatoria se encuentra basada en una reforma a los estatutos que “no ha sido ni siquiera entregada al Instituto Nacional Electoral para su evaluación”.
La Ley General de Partidos Políticos también establece que luego de una modificación estatutaria, los partidos tienen 10 días para presentarla ante el INE. Posteriormente, debe ser verificada por el Tribunal Electoral, y finalmente publicada en el Diario Oficial de la Federación para su entrada en vigor.
Otro aspecto impugnado respecto a la convocatoria es el incumplimiento del principio de paridad en todo, que fue establecido en la constitución en 2019.
“Siendo que en este momento el PRI está encabezado por un hombre, para el próximo proceso electivo la convocatoria debió haber establecido la consideración de que cualquier fórmula que se inscriba debe de estar encabezada por una mujer. Es decir, la convocatoria está violentando el principio de paridad en todo”, agrega la también exlegisladora.
Alejandro Moreno, quien fue electo de manera legal en 2019, tendría que concluir su encargo en agosto próximo, luego de haber extendido su periodo ya en dos ocasiones.
En diciembre de 2022 el consejo político del partido aprobó que se mantuviera en el cargo por 90 días hábiles, para permanecer hasta 2024.
El tema llegó a la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que el 26 de abril de 2023 le permitió a “Alito”, por mayoría de votos, alargar su dirigencia hasta agosto de 2024.
Sin embargo, en esta se establece que ello no implicará una reelección ni una permanencia indefinida en el cargo.
“Esa modificación para que pueda concederse una prórroga lleva implícita la obligación a que, en su ejercicio, el consejo político nacional dé continuidad a los preparativos para los procesos electorales. No implica, en sentido estricto, una reelección, menos una violación al principio de reelección, así como tampoco una permanencia indefinida, toda vez que se trata de un elemento temporal”, se detalla en la sentencia.
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A lo largo de su dirigencia, Alejandro Moreno ha llevado al PRI al desastre. Cuando rindió protesta como líder nacional en 2019, ese partido gobernaba en 12 entidades: Sonora, Sinaloa, Coahuila, Zacatecas, San Luis Potosí, Hidalgo, Estado de México, Tlaxcala, Colima, Guerrero, Oaxaca y Campeche; en contraste, hoy sólo encabeza dos: Coahuila y Durango, donde la coalición Va por México ganó las elecciones gracias a candidatos priístas.
Tras las elecciones del 2 de junio, el tricolor obtuvo incluso menos votos que Movimiento Ciudadano, y pasará de ser tercera fuerza en el Congreso de la Unión, al quinto lugar.
Ante ello, el mes pasado un grupo de 262 priistas, entre ellos expresidentes nacionales y locales, exgobernadores y exlegisladores exigieron la renuncia de Moreno Cárdenas.
Recordaron que desde 2021, cuando el PRI perdió ocho gubernaturas, se pidió la renuncia de Alejandro Moreno, quien continuó su gestión sin hacer una crítica a su desempeño.
En torno a posibles aspirantes a presidir el partido, fuera del círculo Moreno Cárdenas, Dulce María Sauri considera que sí debe haber, pero están “digamos, asustados. Otros, agazapados. Pero lo que sí puedo decir con claridad es que ninguno de quienes hemos estado impulsando estos recursos jurídicos, tenemos absolutamente ningún interés más que defender al PRI”, asegura.
Morena promete sucesión tersa
En el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), pese a haber consenso para que sea la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, la que suceda a Mario Delgado en el cargo, éste último dio a conocer que podría ser a través de un “método combinado” como se elija al nuevo dirigente del partido.
“Tiene que haber una convocatoria donde se establezcan las bases, los requisitos y todos los detalles de cómo será la elección, si va a ser por encuesta o será electa en un Congreso Nacional. Aunque podría hacerse también un método combinado, donde sean las encuestas y después tenga una ratificación en un Congreso Nacional”, explicó.
Delgado se convertirá en secretario de Educación a partir del 1 de octubre, por lo que en septiembre tendría que dejar la dirigencia de Morena.
Alcalde expresó en días pasados su interés por presidir Morena y aunque meses atrás Citlalli Hernández, secretaria general del partido, había dado a conocer su intención de contender por la dirigencia, finalmente externó que apoyará a su compañera de partido.
Mario Delgado ofreció “un proceso democrático y transparente, donde la militancia y la gente sea quien tome las decisiones como siempre en Morena”, al tiempo que adelantó que sería la segunda semana de septiembre cuando se lleve a cabo la elección de la nueva dirigencia.
En 2020, la última vez que Morena renovó su presidencia, Porfirio Muñoz Ledo y Mario Delgado se enfrascaron en una batalla por el cargo, en medio de acusaciones de acoso sexual, despilfarro de recursos y descalificaciones.
Una encuesta realizada por el INE le otorgó el triunfo a Delgado Carrillo, con 58.6% de las preferencias, mientras que Porfirio Muñoz Ledo alcanzó 41.4%.
A las próximas dirigencias nacionales de los partidos les corresponderá hacer frente a los procesos electorales de 2027, cuando se renovarán 15 gubernaturas: Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Colima, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Querétaro y Nuevo León.
Asimismo, estarán en juego San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas; la Cámara de Diputados; 30 congresos locales y mil 900 ayuntamientos y juntas municipales.
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